domingo, 17 de febrero de 2013

Cómo comprar ropa a tus hijos... Sin pasarte!

¿Es mejor comprar en rebajas? ¿Cuanta ropa compro? ¿Qué talla compro?

¿Qué es lo que necesitan para pasar la temporada? ¿Cuánta ropa hay que tener, sin desaprovecharla, por estación? ¿Han pegado el estirón y no les sirve nada?  Consejos para no comprar de más, ni acumular sin utilizar.
Es importante enseñar a los niños a vestirse adecuadamente para cada ocasión. Lo mejor es dividir la ropa según su uso:
  • Ropa para el colegio:  Más cómoda y sufrida. Si el colegio no tiene uniforme será esta ropa    la que  cumpla con este cometido, incluyendo la ropa deportiva. Si tiene uniforme, problema resuelto
  • Ropa de salir:  Un poco más especial. La comodidad para usar y lavar debe ser la norma. No conviene comprar mucha ropa demasiado formal, porque suele quedarse nueva. Es mejor usar complementos para definirlo: diademas, corbatas, broches, zapatos…
  • Complementos:  Comprar o reponer los leotardos y medias que combinen con la ropa. Aquí se incluye la ropa interior. Tener en cuenta que se lava mucho y en la medida de lo posible, optar por algodón y tejidos naturales.
  • Básicos:  Jerseys, camisetas, camisas, blusas, vaqueros… Es la ropa que más se usa, por lo que hay que no hay que escatimar con la calidad (lo que no necesariamente implica mayor precio). También es importante comprobar que el cuidado de la prenda es sencillo y que va a resistir muchos lavados
Otras cosas para tener en cuenta antes de salir a comprarles ropa.

Combinar prendas:
Es útil que las prendas admitan varias combinaciones distintas, para sacarles el mayor partido y que no dé la impresión de repetir conjunto constantemente. También se debe ojear las tendencias y ver cómo adaptar lo que ya tenemos.

Abrigarse por capas:  
En invierno es mejor abrigarse por capas porque se conserva mejor el calor corporal. La ropa se aprovecha más y se pueden lograr combinaciones muy divertidas, más o menos calentitas, según sea necesario. Por ejemplo, una combinación muy trendy es superponer una camiseta sobre una camisa, ideal para otoño o poner un sueter debajo de una camisa o polo para ir más abrigados.

Qué opinan los niños:  
A partir de determinadas edades es mejor tener en cuenta sus gustos. Se ahorra en discusiones y se evita que haya prendas arrinconadas. No supone dejar la decisión en sus manos, sino que sean ellos quienes elijan entre varias opciones.

¿Es mejor comprar en rebajas?
Comprar en las rebajas del año anterior y guardar para el siguiente conlleva el riesgo de que el niño crezca más de lo esperado y la ropa se quede sin estrenar. Es posible encontrar ofertas en temporada tan ventajosas como las rebajas, sabiendo exactamente lo que hace falta. 

¿Qué tamaño de ropa compro?
Al comprar una prenda hay que prever que los niños crecen. No debe ser demasiado justa, ni excesivamente grande, porque nunca les llegará a sentar bien. Como norma general (que puede variar según el tallaje de la marca) una talla más de la suya hace que puedan usar la ropa más de una temporada, pero sin ir desgarbados. 

Reciclar ropa del año pasado:
Al probarles la ropa del año pasado revisar con qué se va a conjuntar. Si no va con nada, adquirir algún básico para poder darle uso.

Cuando los niños quieren ropa de "marca":
Cuando llegan a la edad “de las marcas” hay que enseñarles que “todo no se puede”, que hay un presupuesto y que para tener unas cosas hay que renunciar a otras o que no se puede gastar todo en una única prenda, por mucho que les guste. 

Cuanta ropa comprar:
A la hora de decidir la cantidad de ropa que se va a comprar hay que tener en cuenta las veces que se pone la lavadora en casa. Si compras en exceso, desaprovechas la ropa, pero si te quedas corta, te obligas a lavar y planchar casi cada día.

Limpieza de armarios:
Hay que retirar del armario todo lo que queda en desuso por pequeño, por viejo o por la razón que sea. Después, hay que separar lo que se pueden aprovechar con los hermanos, lo que se va a ceder a familia y amigos, lo que se va a dar a la beneficencia y  lo que se va a llevar a reciclaje. Es la manera de no tener el armario lleno de ropa  que no se usa y mantenerlo ordenado, sin trabajar en balde. 

¿Y tú? ¿Tienes claro qué comprar y cuanto necesitan? ¿Sacas todo el partido posible a la ropa de tus hijos? ¿Prefieren la ropa de marca? ¿Salís juntos de compras?

No hay comentarios:

Publicar un comentario