viernes, 28 de septiembre de 2012

Trucos para Ahorrar



Viejos trucos para ahorrar sin darse cuenta


Recuerdo que, cuando era pequeña, ahorrar no me suponía ningún esfuerzo. Vale, no tenía que hacer frente a ningún gasto, pero mis ingresos eran pocos e irregulares.Digo esta obviedad, porque según los expertos, hay que simplificar y retomar viejos hábitos, para conseguir hacerse con unos ahorrillos.

-Ahorrar sin darse cuenta: no, uno siempre sabe que está ahorrando, o lo que es lo mismo, renunciando a gastar dinero. Se refiere a olvidar la cifra que se ha conseguido reunir, para dejar de pensar en lo que se puede comprar con ella.

-Guardar toda la calderilla que se pueda. Aunque al principio es relativamente fácil  saber cuánto dinero se guarda, llegará un momento en que lo olvidemos. No se despreciará ninguna moneda, ni las de un céntimo. Un grano no hace granero…

- Atesorar el dinero en  diferentes sitios, ya sean cuentas corrientes, huchas o tarros. Recomiendo  usar distintos tarros, porque en las cuentas corrientes se suelen domiciliar gastos y saber que hay un colchón para imprevistos puede acabar con los ahorros. Además, hay extractos que te informan de lo que tienes. Si no sabes cuánto hay, no lo puedes gastar.

 De esta manera, además, te obligas a guardar dinero en los diferentes “escondites”.
-Hay que guardar el dinero que conseguimos ahorrar en nuestros gastos diarios: cuando conseguimos un descuento o hay una oferta especial o las cosas están rebajadas o más baratas de lo que es habitual. Si no, acabaremos gastándolo.

- Cuando uno ha conseguido una pequeña cantidad, adquiere el hábito de dejar de gastar en ocasiones y guardar el dinero: renunciar a cenar fuera de casa alguna vez, cuando un mes “vamos bien”, se puede guardar algo más de dinero.
Además de estos consejos tan facilitos, hay algunas cosas que requieren algo más de práctica:

-Hay gastos negociables y otros innegociables. La hipoteca de la casa da poco margen, aunque uno nunca debe casarse con el banco que la concede. De vez en cuando hay que mirar si se pueden obtener mejores condiciones. En otros gastos, como la factura del teléfono o el móvil conviene estar al día en lo que a tarifas se refiere, porque suponen un ahorro considerable y se pueden negociar más frecuentemente.

-Planificar las compras y evitar las que se hacen impulsivamente. Lo mejor para ello es hacer una lista de las necesidades que tenemos y no salirnos de ella. Posponer lo que no está en la lista ayuda a no gastar dinero de más.

-Hacer un presupuesto. Listar los ingresos y las necesidades, de modo que nunca los gastos superen a los ingresos. Una buena idea es separar un 10 % de los ingresos y destinarlo a ahorro, directamente, separándolo. Así hay que reducir las necesidades sí o sí.

- Se pueden reducir los gastos pidiendo descuentos y aprovechando las ofertas (lo de toda la vida, sí). Otros trucos son :
-          Hacer la compra con el estómago lleno. Siempre.
-         Negociar los suministros (luz, agua, gas, teléfono…) y hacer todo lo posible por ahorrar en este apartado.
-          Aprovechar las rebajas para comprar la ropa del año siguiente, siempre planificando.
-         Mantenerse al día de las ofertas de ocio gratuíto. Entrad en la web de vuestro ayuntamiento. Os sorprenderá mucho la oferta.

¿Qué os parecen estas ideas? ¿Conseguís ahorrar algo todos los meses?
¿Tenéis nuevos trucos?

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